El presidente ruso, Vladímir Putin, y su homólogo turco, Recep Tayyip Erdogan, asistieron a la ceremonia de entrega de combustible en la central nuclear de Akkuyu en Turquía.
La batalla de Stalingrado se convirtió, tras la rendición alemana el 2 de febrero de 1943, en un presagio de victoria del Ejército soviético sobre las tropas nazis.
Según el dirigente ruso, el mercado energético mundial se vería fuertemente afectado por una propuesta que analiza la Unión Europea y otras potencias para limitar los ingresos de Moscú.
La Cámara Baja de Rusia adoptó ese jueves una ley que prohíbe la "propaganda de relaciones sexuales no tradicionales", la pedofilia y la reasignación de género en los medios de comunicación, Internet, la publicidad, la literatura y el cine.
El 15 y 16 de noviembre se reúnen en Bali los países más ricos del mundo en un contexto macroeconómico complejo y con reminiscencias de la guerra fría por las divisiones que derivaron tras la guerra en Ucrania.
Turquía, que junto a la ONU fue mediadora del acuerdo, ha multiplicado sus esfuerzos diplomáticos para salvar el pacto, en el que Rusia suspendió su participación. El acuerdo "beneficia a todos", dijo el gobierno turco.
En su discurso previo a la anexión de las regiones ucranianas invadidas clamó contra el "imperialismo" occidental que quiere hacer de Rusia una "colonia". La anexión es no obstante "definitiva", según el presidente ruso.