El avance de los talibán sobre territorio afgano se produce a pasos de gigante. Esta semana se apoderaron de las ciudades de Farah y Pul-e Khumri, ubicadas al norte del país. En total son ocho las capitales de provincia que se encuentran bajo su dominio.
Ante este contexto de violencia, miles de personas han huido del norte y muchas llegaron a Kabul tras un viaje agotador de diez horas en coche durante el que tuvieron que atravesar numerosos retenes insurgentes.
La Comisión Europea pidió que se fortalezca el apoyo a los países vecinos, en particular a Irán y Pakistán, para que puedan recibir a los ciudadanos afganos que huyen del conflicto. Con un recuerdo muy reciente de lo ocurrido con los refugiados sirios, la UE quiere impedir una posible crisis humanitaria que golpeé a las puertas de Europa.
Los choques armados entre las fuerzas del Estado afgano y los rebeldes talibanes ya han provocado el desplazamiento interno de más de 400.000 personas y las previsiones apuntan a que al menos otro medio millón de personas emprenderá la huida.