Ya son 1.200 las víctimas desde la firma del acuerdo de paz con la guerrilla de las FARC en 2016.
La Defensoría Regional de Chocó, en el noreste de Colombia, reportó el asesinato del líder social Luis Picasio Carampaima en Santa Catalina de Catrú, municipio de alto Baduó, a manos de una organización armadas irregular, tal y como informó el Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (Indepaz).
Su asesinato se produjo este 1 de julio, tras la incursión en ese territorio indígena de varios hombres del grupo armado, que lo decapitaron. Indepaz advirtió que el crimen podría generar «riesgo de desplazamiento masivo».
Asimismo, el Instituto señaló que la Defensoría del Pueblo ya había advertido del riesgo en que se encontraba la comunidad Catrú y otras de la zona «por el accionar de grupos armados ilegales» y había instado a su «protección y atención efectiva y urgente».
Por estos hechos violentos, la Defensoría pidió protección y atención efectiva y urgente para las comunidades del resguardo Catrú, Dubasa y Ankosó, que se encuentran en riesgo por el accionar de grupos armados ilegales que se encuentran en disputa.
84 asesinatos de líderes y defensores de los D.D.H.H. en 2021
Según el registro de víctimas que contabiliza la organización, con el asesinato de Luis Picasio son 84 los líderes y defensores de derechos humanos asesinados en Colombia en lo corrido de 2021, y ya suman 1.200 desde la firma del acuerdo de paz con la guerrilla de las FARC en 2016.
Las poblaciones más afectadas por estas situaciones viven en los convulsos departamentos de Norte de Santander, Antioquia, Chocó y Nariño y, según De Roux, «llevan a que muchos regresen a las armas, a que los campesinos por falta de oportunidades tomen el camino de la guerra porque se sienten seguros en ella».