En el marco de la Comisión de la Verdad, la excandidata presidencial Ingrid Betancourt y otras víctimas civiles del conflicto armado se encontraron cara a cara con sus captores. La Comisión de la Verdad surgió del Acuerdo de Paz y su trabajo concluye en el 2021 con un informe que busca reparar a las víctimas y echar luz sobre los actos llevados a cabo por la guerrilla.
El contexto de pandemia dilató algunos procesos contemplados en el acuerdo de paz que firmaron el gobierno del entonces presidente Juan Manuel Santos y las FARC en 2016. Un acuerdo que sigue siendo objetivo de tensiones dentro de la polarizada sociedad colombiana y boicoteado por la ultraderecha uribista. Con casi tres años en el poder, el Gobierno Duque no ha hecho nada para detener el incesante asesinato de líderes sociales y excombatientes que firmaron la paz, lo que ensombrece el panorama.
No sólo el trabajo de la comisión se vio postergado por la pandemia. El pacto tiene como objetivo transformar los territorios más golpeados por la guerra, y cerrar la brecha entre el campo y la ciudad, el contexto de pandemia tuvo un impacto negativo en la ejecución de las obras de pequeña infraestructura y la provisión de bienes y servicios en los territorios, y en proyectos de mayor envergadura.
Ingrid Betancourt les recordó a ex-Farc su crueldad en el secuestro